«SIEMPRE ME SENTÍ ARGENTINO»

1721

Nacido en Barcelona, pero hijo de argentinos, Carles Javier Codina Thomatis será uno de los tres representantes albicelestes en los Juegos Paralí­mpicos en Rusia. Competirá en Ski Alpino y Snowboard.

“Representar a la Argentina en Sochi es lo mejor que me puede pasar. Pasé muchísimos años afuera, pero siempre recordando el Mundial 78, Mendoza, la familia y los amigos. Desde chico siempre me sentí argentino y me encanta poder representar al gran país donde está toda mi familia”, confesó Carles al comienzo del diálogo con www.enard.org.ar, dejando por finalizada cualquier duda sobre su sentido de pertenencia.

A los 40 años, Codina participará de sus primeros Juegos Olímpicos, compitiendo en las pruebas técnicas de Ski Alpino -Slalom y Slalom Gigante- y en SnowboardCross.

“El Slalom es más técnico, consiste en pasar unas 60 puertas donde están todas muy juntas. El Slalom Gigante tiene entre 33 y 40 puertas en una pista más larga, se corre más”, explicó Carles, que empezó a esquiar a los 5 años. “Mi objetivo en estas pruebas es terminar entre los primeros 25 del ranking, aunque va a ser difícil”, agregó. “El SnowboardCross es una carrera en una pista donde hay peraltes, dubbies, saltos y curvas elevadas. Es muy divertido. Hoy estoy entre los diez mejores y apunto a llegar en el quinto lugar”, completó.

Además de su nacionalidad, el atleta paralímpico heredó de su familia la pasión por este deporte: “Mis abuelos esquiaban en Penitentes y Vallecitos, ambos centros en la provincia de Mendoza, donde viví desde casi recién nacido hasta los 4 años. Además, mi abuelo Jorge Thomatis hizo un proyecto para unos japoneses para hacer un centro de esquí en la cordillera… ¡que  ahora se llama Las Leñas! Lo llevo en la sangre”.

Más allá de su fuerte conexión con la provincia mendocina, Carles dio sus primeros pasos en España. “Empecé a esquiar cuando me mudé a Cataluña con mis padres. Vivíamos cerca de un centro esquí, Port de Comte”, recordó Codina. “A los 14 años empecé con el snowboard, cuando llegó a España la modalidad. Además, desde los 18 años he estudiado como profesor de deportes de nieve: ski, snowboard, telemark, socorrista en pista, maquinista… amo la nieve y el deporte”, agregó.

Luego del accidente sufrido, Carles tuvo que volver a empezar. “Pasé un año y medio en hospitales hasta que finalmente recuperé la fuerza. Mucho gimnasio y a esquiar otra vez”, contó el argentino. “Tuve la gran suerte que yo ya trabajaba de profesor y entrenador en esquí adaptado. Prácticamente, me enseñé a mí mismo otra vez”, agregó. Además, nos dejó un consejo para cualquiera que atraviese una situación similar:“Paciencia, esperanza y, sobretodo, escuchar a las personas que nos quieren ayudar. Es duro pero uno se acostumbra. Es fundamental estar contento con uno mismo, quererse y ser feliz”.

Más allá de los resultados, Codina tiene otros objetivos en mente. “Me gustaría que gracias a mi participación se una más gente a los deportes de nieve y, en un futuro, conseguir medallas para Argentina. Por mi parte, espero que todo salga bien y poder repetir en Corea 2018”, expresó con gran entusiasmo.

El atleta argentino tendrá su debut el jueves 13 de marzo a las 09:15 hs., cuando se presente en la primera pasada de la prueba de Slalom. Al día siguiente compite en SnowboardCross y el sábado 15 completa su participación con el Slalom Gigante.

A siete días del debut, Carles maneja la ansiedad de la mejor manera posible: “Previo a la competencia me concentro en que lo puedo hacer mejor que la última vez y sin lesionarme”, explicó. “Además, antes de cada bajada pienso siempre en mi hija Karla y en mi familia. Les gustaría verme pero están lejos, así que les dedico mi bajada”, remató.