El ENARD llevó adelante una prueba inicial para la evaluación genética de atletas centrada en el metabolismo, la dieta, la nutrición y el ejercicio físico. Se realizó sobre 25 jóvenes de ocho deportes distintos.
El ENARD está llevando a cabo un plan piloto para la evaluación genética de nuestros atletas. Se trata de una tecnología de última generación, cuya aplicación no tiene más de dos años. El estudio analiza la predisposición genética que un deportista tiene a distintas circunstancias centrada en la dieta, las necesidades nutritivas, la salud metabólica y el ejercicio físico.
La prueba se realizó sobre 25 atletas provenientes de ocho deportes distintos: tenis, golf, tenis de mesa, ciclismo, atletismo, ski alpino, esquí náutico y triatlón. Más allá de su disciplina, todos ellos reúnen tres características comunes: son jóvenes, se destacan en su categoría y están dentro de un sistema intenso de entrenamiento.
Ayer se presentaron internamente los resultados, los cuales serán comunicados a los atletas en los próximos días. A partir de allí, se realizará un trabajo de 18 semanas con cada uno de ellos. A fin de año serán evaluados los beneficios que otorga esta nueva tecnología, para ampliar su aplicación en caso de ser positiva. El servicio es brindado por Pathway Genomics, empresa ubicada en San Diego, California, Estados Unidos.
